La maternidad. Más
Hablar de la muerte no es fácil.
Ahora no quiero hablar de la muerte en general, ni de la pérdida de personas queridas a las que me he sentido tan vinculada.
Tampoco quiero retomar el episodio de la película.
Quiero hablar de mi misma, de cómo también tengo una nueva percepción de mi propia muerte.
De pronto, la certeza de ser madre me despierta un interés especial por mi perdurabilidad. ¿Cuánto tiempo voy a estar aquí? ¿Podré crecer junto a mi hija el tiempo necesario para acompañarla hacia su propia independencia? ¿Qué va a pasar cuando yo no esté?
¿Acaso ahora el tiempo es más valioso? No lo sé, es posible que estas sensaciones tengan que ver con mi edad, pero antes de sentirme mamá, nunca me había preguntado si llegaría a los 70.
Seguramente, responde a ese nueva manera de acomodar mi trayectoria, a esas nuevas responsabilidades que adquiero. Tal vez va unido al compromiso íntimo que he ido tejiendo en mi interior con mi hija. Tengo toda mi vida, para vivir ese compromiso.
¿Quiero vivir más? ¿sí? ¿no?...
¡Me lo pido!, como dice Nic cuando jugamos a los imposibles ,a pedir todas las cosas que vas viendo por ahí o que están en tu imaginación, tipo: un helicóptero, una nave espacial, una docena de caravanas, tres casas con piscina en el comedor, pista de patinaje y varios coches de carreras y
No es fácil, no.
Ahora no quiero hablar de la muerte en general, ni de la pérdida de personas queridas a las que me he sentido tan vinculada.
Tampoco quiero retomar el episodio de la película.
Quiero hablar de mi misma, de cómo también tengo una nueva percepción de mi propia muerte.
De pronto, la certeza de ser madre me despierta un interés especial por mi perdurabilidad. ¿Cuánto tiempo voy a estar aquí? ¿Podré crecer junto a mi hija el tiempo necesario para acompañarla hacia su propia independencia? ¿Qué va a pasar cuando yo no esté?
¿Acaso ahora el tiempo es más valioso? No lo sé, es posible que estas sensaciones tengan que ver con mi edad, pero antes de sentirme mamá, nunca me había preguntado si llegaría a los 70.
Seguramente, responde a ese nueva manera de acomodar mi trayectoria, a esas nuevas responsabilidades que adquiero. Tal vez va unido al compromiso íntimo que he ido tejiendo en mi interior con mi hija. Tengo toda mi vida, para vivir ese compromiso.
¿Quiero vivir más? ¿sí? ¿no?...
¡Me lo pido!, como dice Nic cuando jugamos a los imposibles ,a pedir todas las cosas que vas viendo por ahí o que están en tu imaginación, tipo: un helicóptero, una nave espacial, una docena de caravanas, tres casas con piscina en el comedor, pista de patinaje y varios coches de carreras y
No es fácil, no.
1 comentario
Xose -
Son palabras para Julia... besos.