Blogia
Adoptalia

Cuatro habitaciones tiene mi casa

Cuando nos trasladamos a vivir a este piso nos gustó que tuviera cuatro habitaciones. Enseguida las ocupamos, la más grande para nosotros, luego Nic eligió la suya, la que tiene una puerta por la que puedes salir al balcón, otra para el estudio y en la que quedaba, pusimos un armario enorme, la tabla de planchar y listos.

Ahora tenemos que reorganizarnos. Nic ha propuesto varias veces poner dos camas en su habitación para que su hermana comparta ese espacio con él y no tengamos que renunciar al estudio. Claro, que él ya tiene 10 años y falta muy poquito para que sea un adolescente celoso de su intimidad, aunque aún no lo sepa.
Ha sido fácil convencerle de que será mejor que cada uno tenga una habitación propia. De esta forma siempre podrán elegir si quieren instalarse juntos, jugar, dormir, compartir o si prefieren estar cada uno en su cuarto. A mi me habría encantado poder elegir, siempre he compartido habitación, primero con mi hermana Montse y luego cuando nació Beatriz, mi hermana pequeña, también con ella.

Cuatro habitaciones tiene mi casa, cuatro angelitos que me acompañan, una me da leche, otra me da lana y otra mantequilla para toda la semana.

¿No era así?

0 comentarios